EXCLUSIVA LA HISTORIA DEL FALDÓN QUE LLEVÓ ANITA EN SU BAUTIZO, UNA PIEZA ESPECIAL Y CON SIGNIFICADO ‘El faldón, con el que se bautizó a Aless, lo tuve que mandar a arreglar, porque Anita es muy alta. Con ocho meses, usa una talla 16 y pesa nueve kilos. Claro, tiene a quien salir porque su papá medía 1,95’, nos dice Ana Obregón
El emotivo bautizo de Ana Sandra Lequio y el significado del faldón
El bautizo de Ana Sandra Lequio, la hija de Ana Obregón, ha sido un momento emotivo y significativo. La pequeña lució un faldón blanco que ha sido utilizado por generaciones en su familia, incluyendo a su hermano Aless Lequio, y que pertenece a la Familia Real. El faldón, confeccionado con tela de hilo de color beige, puntillas de Valenciennes, encajes bordados a mano y cintas de raso, fue utilizado por primera vez en 1938 en el bautizo del rey emérito Juan Carlos I. La elección de este faldón para el bautizo de Ana Sandra ha sido un gesto cargado de simbolismo y tradición familiar
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El bautizo, celebrado el 17 de diciembre, coincidió con la Navidad, un momento especial para Ana Obregón, quien no había celebrado estas fechas desde hacía tres años, tras el fallecimiento de su hijo Aless. La elección del faldón para el bautizo de Ana Sandra ha sido un homenaje a su hermano y una forma de mantener viva la tradición familiar. La pieza, que ha sido cuidadosamente preservada a lo largo de los años, representa un lazo único entre las generaciones de la Familia Real y la familia de Ana Obregón
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El faldón, que ha sido utilizado en los bautizos de varios miembros de la Familia Real, es una reliquia de gran valor histórico y sentimental. Su uso en el bautizo de Ana Sandra Lequio ha resaltado la importancia de la tradición y la conexión con la historia de su familia. El gesto de Ana Obregón al preservar y honrar esta tradición ha sido un momento conmovedor y significativo para su familia y para aquellos que aprecian la historia y el simbolismo detrás de esta pieza única
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